L´Espina des de Sant Roc

22 de Mayo del 2010
Llegamos a la ermita de Sant Roc sobre las once, ésta dista dos kilómetros y medio del pueblo enturonado de Paüls, el cual ya conocemos de otras rutas.

Nos sorprende lo cuidado que está el entorno de la ermita; pues hay barbacoas y un buen número de mesas y bancos de piedra y una fuente con un montón de caños de agua fresca y muy rica.


Nada mas empezar a caminar lo hacemos en constante subida por medio del bosque, este tramo es fácil de seguir porque es el Gr-7 y vemos las marcas.

Al cabo de una media hora llegamos a la Font del Teix (hay varias con este nombre en Els Ports).
Cogemos dirección al Mas del Castillo, lo rodeamos y tomamos un sendero que se hace mas inclinado, atravesamos un par de puertas para el ganado y seguimos subida.

Cuando llegamos al coll del Camp, divisamos un gran paisaje; el entorno d´Orta de Sant Joan presidido por las rocas de Benet.
Seguimos subiendo y pasamos por varios colls.
Llegamos al coll de l´Enrejolada, desde aquí luego bajaremos a Sant Roc.

En otros veinte minutos llegamos a l´Espina, donde hay un vértice geodésico, sobre una gran plataforma de hormigón y piedra.

Aquí paramos a comer el bocadillo, disfrutando de las vistas y también de un bonito día de sol.
Regresamos de nuevo al coll de l´Enrejolada y cogemos un sendero que transcurre por el bosque durante mas de una hora, hasta encontrar una pista, que seguiremos a la izquierda, hasta llegar al cruce de la Font del Teix, desde aquí solo tenemos que desandar el camino a la ermita.
 En primavera es una buena época para hacer este itinerario, en verano hace mucha calor y en invierno suele hacer, frío, niebla o viento.

La Mola por la Font Soleia

16 de Febrero del 2013
Salimos del aparcamiento de Can Robert, muy cerca están las tumbas del mismo nombre, después de pasar por ellas, tomamos dirección de Can Pobla. También se puede llegar hasta allí en coche, si se quiere acortar la excursión.

Llegamos a Can Pobla y pasamos por la pista que hay debajo y rodea la montaña.

Conectamos con el Camí dels Monjos, situado en la cuerda de la montaña, por donde subimos hasta la cinglera, tocando el Pi del Vent.

Tomamos el sendero de la derecha ( marcas verdes ), es el Camí de la Font Soleia. Hay unas buenas vistas del macizo durante el recorrido. Después de andar un buen tramo, llegamos a ella. Tiene puesto un curioso tapón de goma, para no desperdiciar el agua.

Vamos por el sendero hasta encontrar una canal, por la que subimos agarrándonos a las raíces de los árboles. Hay marcas azules y amarillas.

Llegamos a una pequeña explanada, vamos a la izquierda y bajamos por una canal un pequeño tramo y vemos a la derecha la entrada a la Cova de les Animes. 

Al principio puedo ir de pie pero pronto me tengo que agachar y a continuación tengo que ir reptando, la cavidad se va estrechando.
Llego a un punto que no puedo pasar, ya que hay una especie de compuerta que me impide seguir la incursión, me cuesta darme la vuelta, al fin lo consigo y puedo salir, pero con tierra hasta las pestañas.

Antes de encontrar la cueva y buscando ésta, hallamos una especie de refugio, a orillas del precipicio, hecho muy artesanalmente, subir todo el material hasta aquí me parece una tarea digna de personas con mucho tesón y una gran pasión por la montaña, además de un espíritu de sacrificio encomiable. Le llaman Refugi dels Maquis.

Refugi dels Maquis

Interior Refugio

Regresamos de nuevo al sendero que sube a la Mola, pero nos desviamos a la derecha por otro camino que pasa por la Font del Saüc y subimos por una canal que va directa a la Mola.
Descansamos un rato y miramos en  el mapa por donde bajar, que no sea el transitado Camí del Monjos.

Regresamos por una canal bastante empinada, durante bastante rato, encontramos algún que otro sendero, pero nos dejamos llevar por la intuición y al fin desembocamos en la pista de Can Pobla. Cogemos a la derecha y seguimos la pista hasta encontrar las tumbas de Can Robert y en seguida el aparcamiento.

Can Pobla

Ha sido una ruta no muy larga pero entretenida e interesante, ya que hemos subido a la Mola, por uno de los caminos menos transitados y eso se agradece, la ruta clásica es una procesión de gente y eso le quita encanto, a mi parecer.

Día nublado, con algo de neblina, que no favorece a las fotos pero que se le va hacer, la climatología es así.

Can Robert

Sta. Maria de Miralles- Castell de Queralt

9 de Febrero del 2013

Santa María de Miralles, es un pequeño conjunto de casas de carácter rural diseminadas.
Pasando éste, seguimos la carretera, encontramos a la derecha el restaurante Ramonet, seguimos , como un kilómetro y medio después hallamos el restaurante Ca l´Escolà, donde hay una ámplia zona de aparcamiento y desde aquí comenzamos el recorrido.

Frente al restaurante hay una pista asfaltada que lleva directamente al castillo y a la iglesia de Miralles.

En menos de quince minutos llegamos a las ruinas de lo que fue el castillo. La iglesia románica está reformada y en buen estado.
En la edad media habían unas casas que hacían de muralla al castillo, de las cuales quedan algunos vestigios, hablamos del siglo X.

Hay una casa nueva junto al recinto, por detrás de ella tomamos un camino que en pocos minutos va a parar a un campo en el que hay una torre eléctrica en medio, lo cruzamos y en frente hallamos el GR, que ya no dejaremos hasta el final.

Caminamos por pista, senderos y parte del itinerario lo hacemos bordeando campos de cultivo, al parecer de cereales.

Después de unas dos horas llegamos a un coll, prácticamente a los pies del castillo de Queralt (851 m. ). Desde aquí solo nos queda subir un breve trecho por un angosto sendero.

Aunque hemos estado en otra ocasión no deja de sorprendernos las vistas que nos regalan las ruinas del castillo, pues son tan extensas que entre otras podemos ver la Sierra del Cadí y el Pirineo, cuyas cumbres están cubiertas de nieve.


Bajamos y frente al castillo se encuentra la iglesia de Sant Jaume, cuya construcción es próxima a la fundación del castillo, sobre el siglo XI. Está recién reformada.

Emprendemos el regreso por el mismo camino pero al llegar a un coll muy marcado, en el que hay  unos letreros, decidimos alargar la ruta y subir a la Aguja Grossa de Miralles que está a unos veinte minutos del citado coll. Desde aquí también hay buenas vistas.

Cuando bajamos paramos a comer junto a una masia en ruinas.
Luego atravesamos la pista y justo en frente hay un sendero que sube al Grony de Miralles, otro de los puntos altos de la zona ( 866 m. ). En su cima encrestada hay un belén, bajo una gigantesca hoja de parra metálica.

Regresamos de nuevo al coll y seguimos el GR., hasta que encontramos el letrero que señala el camino a la Creu de Coma-roques ( 795 m. ). Allá que vamos.

Llegamos hasta la cruz, en la que hay otro belén y hoy ya van tres, pues en cada cima encontramos uno.
Después de hacer alguna foto seguimos un tramo de sendero, por cierto bastante deteriorado por las motos, vimos que tomaba otro rumbo y decidimos volver sobre nuestros pasos a encontrar de nuevo el GR.,
Llegamos al restaurante sobre las cuatro.
Ha hecho un día muy soleado y claro.
Este itinerario es apropiado para pasar una mañana de invierno como la de hoy.
El recorrido se puede acortar omitiendo la subida a las tres cimas, por lo que queda en un plácido paseo de unas cuatro horas.

Penyes Altes y Moixeró

29 de Mayo del 2010

Llegamos al punto de salida que es la carretera de Bagà al Coll de Pal, poco antes de las diez.
Aparcamos en una curva que hay antes de cruzar el puente de la C-16, aquí mismo cogemos la pista que sube al refugio de Sant Jordi, es el GR- 107.

En diez minutos llegamos al pequeñísimo pueblo de Gréixer. Cogemos por detrás del pueblo la pista que va a la canal de la Serp, marcada con pintura amarilla e hitos.

Después de media hora llegamos a la Roca de la Ventolana, estamos a 1.450 metros, lo que quiere decir que ya hemos subido un buen desnivel.

Seguimos siempre en constante subida. Cruzamos varias tarteras y una pradería muy extensa e inclinada.
Por fin después de mas de tres horas llegamos al Collet Raset y aquí quedamos atónitos del maravilloso paisaje que podemos admirar; Todo el valle de la Cerdanya y el Pirineo al fondo con sus cumbres nevadas.

Nos paramos aquí a tomar un piscolabis y a reponer fuerzas, mientras contemplamos la maravilla que nos rodea.

Tomamos una senda a la derecha para dirigirnos a les Penyes Altes, a las que se accede después de trepar por las rocas en varias ocasiones, en otra media hora llegamos arriba.

Después de hacer las fotos de rigor y admirar las vistas, volvemos al Collet Raset.

Ahora hemos decidido llegar al vecino Moixeró, para ello tomamos a la izquierda desde el Collet.

Caminamos por un inmenso prado verde y al llegar a los pies del Moixeró emprendemos una subida con un desnivel muy acusado.

Llegamos exhaustos, así que decidimos comer en este maravilloso enclave.

Empieza a aparecer la niebla y ya con el estómago lleno y las fuerzas renovadas emprendemos el regreso, bajando al coll de Moixeró, desde donde tomamos un sendero que nos condujo al refugio de Sant Jordi.
Cogemos el GR- 107, que nos lleva a Gréixer pasando por el coll d´Escriu.

Hemos caminado mas de lo que debíamos, por que en el coll de Moixeró, teníamos que tomar un sendero, que hacía mas corto el itinerario, pero lo pasamos de largo.

Ruta larga y dura ya que tiene un desnivel de 1250 metros, pero es una maravilla de las que no se olvidan.
¡Vale mucho la pena!, si encima hace un bonito día como el de hoy se disfruta a rabiar.