jueves, 30 de junio de 2011

Cortalets - Canigó- Cresta de Barbet (2.785mts).

Sábado 25 de Junio del 2011
Salimos del hotel cerca de las nueve dirección Prades por una sinuosa carretera plagada de curvas. Pasamos por Villafrance y nos dio pena no parar a verlo, pues parece muy interesante pero el tiempo apremia. A la entrada de Prades vimos un indicador del Canigó y seguimos por allí durante algunos kilómetros hasta que nos dimos cuenta que no era el acceso correcto y volvimos a Prades y desde allí a Villerach que es un pequeño pueblecito, pasado éste tomamos una pista de 20 kilómetros que se hace interminable ya que algunos tramos están llenos de baches en fin, que hay que circular muy despacio.
Después de un buen rato de pista llegamos al refugio de Cortalets. Aparcamos el coche un poco más abajo. Había fiesta y todo el rato sonaba música en catalán y francés. Había mucha gente por todo el contorno.
Emprendimos la subida después de pasar por un lago. Ahora es todo subir y subir acompañados tanto de gente que sube como que baja. Nos hizo gracia ver que bajaban unas personas con unos gigantes cabezudos a cuestas. ¡Insólito!
Parece que no llegues nunca pues el caminito es muy pendiente y va haciendo constantes eses. Vimos toda clase de personajes por el camino y de todas las edades, incluso un par de niñas pequeñas que nos llamó la atención con la soltura que subían.
Llegamos al Cim del Canigó y aquello era un hormiguero pues no cabíamos. Estuvimos el tiempo justo de hacer la foto y echar un vistazo al paisaje. Tenemos que bajar por la denominada Ximeneia pero tenemos que esperar un rato porque hay una cursa y no para de subir gente. Encontramos un hueco y empezamos a bajar desgrimpando agarrándonos a las rocas. No es nada difícil aunque desde arriba parezca lo contrario.
Una vez abajo seguimos por un caminito y en pocos minutos pasamos por la “Bretxa Durier” donde había gente escalando. Uno poco más adelante dejamos dicho camino y tomamos otro que nos llevó hasta la Portella de Vallmanya y desde aquí al Collet del Pic Barbet donde paramos a comer. Después seguimos por la cresta de la montaña y luego bajamos hasta el refugio.
Bajamos por la pista con el coche tardando más de una hora y volvemos a casa a la que llegamos a las 11 de la noche.
Han sido unos días apasionantes y además ha hecho un tiempo perfecto ¡Qué bien!







miércoles, 29 de junio de 2011

Carlit desde les Bulloses (2.923mts.)

Viernes 24 de Junio del 2011

Llegamos al pantano de les Bulloses poco antes de las diez procedentes de Font-Romeu, lugar donde hemos pernoctado (en el hotel Sun Valley). Aparcamos junto al embalse y emprendemos la ruta.
Hace un bonito día de sol y despejado de nubes lo cual favorecerá para disfrutar del paisaje.
Nada más comenzar nos encontramos el primer lago, El Viver y diez minutos después el de Dugues. Son unos lagos preciosos y muy grandes y el entorno es de ensueño. Vemos el Carlit bastante cerca. Vamos subiendo pero hasta ahora la pendiente es muy suave.
Pasamos un par de lagos más; El Catellat y El Trebens y acto seguido llegamos al Estany Sobirà con su extraña forma ya que parece el continente africano.
Justo después llegamos a una encrucijada y tomamos a la derecha encarándonos al Carlit. Ahora la pendiente cada vez es más acusada, suerte que corre un vientecito agradable. Pasamos junto a un pequeño lago en el que todavía hay nieve y esto le da un color azul que no parece real.
Cuando llevamos un buen rato de subida empieza la zona rocosa y hay que trepar agarrándonos de pies y manos con cuidado de no resbalar y sobre la una llegamos a la Pica del Carlit en la que había bastante gente. Estuvimos un instante observando el paisaje, después caminamos hasta el denominado Cim Petit para acabar de maravillarnos con el entorno. Comenzamos el retorno bajando por el mismo camino hasta llegar a la encrucijada antes citada, la cual cogeremos a la derecha.
Frente al estany Lonç paramos a comer y después seguimos pasando por el Estany Valley y aquí nos desviamos hacia el Llong y después por el Llat, pasado éste tuvimos unas dudas y retrocedimos unos centenares de metros hasta encontrar el Estany Sec que no merece ese nombre ya que está rebosante de agua. También pasamos por el Estany de la Comassa y el Negre ¡Será por lagos!
Sobre las cinco llegamos donde teníamos el coche. Tomamos la pista que tiene 12 kilómetros pero que está muy bien conservada y a eso de las 6 llegamos al hotel, nos duchamos y nos fuimos a Mont-Lluís a cenar, pero no encontramos un sitio adecuado y regresamos a Font-Romeu pero antes encontramos una pizzería y allí decidimos cenar.
Sobre las 10 llegamos al hotel y nos fuimos a la cama, puesto que mañana nos esperaba otro apasionante día de aventuras.